Que las civilizaciones más antiguas eran por mucho más avanzadas que la nuestra no es un secreto, y lo digo en especial por ti hijo de puta que tienes toda tu vida en tu celular y no te acuerdas de tu personalidad, si no la revisas en el perfil de tu msn o de tu blog o según las canciones que trae tu iPod que siempre cargas contigo para no estar aburrido nunca; pues en cuanto estas a solas contigo mismo sientes lo vació de tu vida.

Y es que el hombre de antes estaba más conectado con el resto de la humanidad, con si mismo y con el resto del universo, en cambio ahora el ser humano esta en una crisis de identidad tan grande, que prevalece la creencia imbecil de que tus gustos definen tu persona.




A veces el hombre antiguo recurría a ciertas sustancias para acrecentar su grado de bienestar o estar más cercano con el universo.


Entre los antiguos pueblos de mesoamerica era común el uso del Peyote "la planta que hace que los ojos se maravillen", los toltecas y los chichimecas conocían el peyote con 2000 años de anterioridad al descubrimiento de América. Según algunos un símbolo utilizado por los tarahumaras en la ceremonia del peyote aparece en tallas rituales datan de unos 3 milenios antes del descubrimiento de América.
Los aguerridos combatientes chichimecas consumían el peyote a fin de tener ánimos para pelear y no padecer hambre, sed, miedo y según ellos los guardaba de todo peligro.


Los primeros testimonios escritos sobre este cacto sagrado pertenecen a Sahagún: "Hay otra hierba como tunas de tierra, se llama peyotl, es blanca, se encuentra en el norte del país; los que la comen o beben, ven visiones espantosas o irrisibles: dura esta intoxicación de dos a tras días y después de quita.
El consumo del peyote ha subsistido a pesar de la llegada de los europeos y la imposición de sus creencias y costumbres. Los pueblos que lo emplean ancestralmente con fines rituales (coras, tarahumaras, tepehuanis, huicholes y varias tribus estadounidenses), se comportan ante él con temor reverencial. Consideran que los hace entrar en contacto con fuentes divinas y suponen que si no se han "purificado" previamente, los dioses les harán sufrir tremendos castigos.
El uso del peyote también permitía que el cuerpo astral (me imagino que en nuestra cultura occidental esto es el alma) se despegara del cuerpo físico, también despertaba la clarividencia, esta característica la compartía con el “yague” usado por los nativos de la cuenca del rió Amazonas.

También se consumían ciertos hongos como el nanacatl; La gente lo consumía y bailaba y cantaba la otra noche, al otro día lloraban

Según dicen los historiadores , de la Nueva España"los que los comen... sienten vacíos del corazón y ven visiones a las veces espantables y a las veces de risa; a los que muchos de ellos provocan a lujuria y aunque sean pocos. Y a los mozos locos o traviesos dícenles que han comido nanacatl".

En las antiguas culturas Orientales ha sido costumbre por milenios el tradicional uso del opio, que produce euforia y después sueño.