“De repente un lobo adulto surgió de uno de los agujeros…Este animal iba seguido de otro de la misma naturaleza y tamaño .Seguía al segundo, un tercero y detrás de el , dos cachorros ,uno, tras otro.
Muy cerca de los cachorros apareció el fantasma (En este caso un ser de aspecto horrible propio del folclore indio): La mano, el pie y el cuerpo como un ser humano pero la cabeza era como una esfera de algo que cubría los hombros y la parte superior del busto, dejando visible solo un contorno afilado de la cara que era humana. Pisándole los talones apareció otra criatura horrible como la primera pero de menor tamaño .Sus ojos brillaban y escrutaban muy distinto de los niños humanos.”
Este es un fragmento del diario del reverendo J.A.L. Singh, misionero de Bengala a comienzos del siglo XX .Narra el descubrimiento de 2 niños salvajes de corta edad:2 niñas que habían sido criadas en la selva por los lobos. Aunque se dan muy pocos casos en la vida real, los niños criados por animales son un tema bastante común en la mitología y en la literatura popular .
Entre los pocos casos reales se encuentran:
Las niñas descubiertas por el misionero fueron llamadas Kamala Y Amala, (su aspecto monstruoso se debía al barro y la tierra que tenían en su cara) fueron llevadas a un orfanato donde mostraron conductas peculiares como insensibilidad al frió, un olfato y oído muy desarrollados, caminaban a 4 patas, rechazaban toda la comida que les daban, hasta que un día las sacaron al patio justo en el momento en el que comían los perros, entonces kamala corrió hacia ellos y les arrebato un trozo de carne, eran estrictamente carnívoras y nocturnas, y aullaban.
También cabe mencionar a la “niña esquimal” una niña de 10 años de edad que en septiembre de 1973 llego al poblado de Sogny, Francia. Apareció descalza, vestida con pieles de animales y con una calabaza a modo de sombrero. Armada con un garrote, logró matar al perro que un campesino lanzó contra ella. Tras su captura descubrieron que sus pulgares estaban muy desarrollados y que sus rasgos físicos se asemejaban muchísimo a los de los esquimales. Durante un tiempo, la niña permaneció muda y su dieta se componía de pequeños animales que atrapaba y comía crudos. A medida que pasaban los años aprendió a hablar y los científicos supieron más detalles de su vida. Al principio sólo recordaba a un gran animal que vivía en el agua y haber cruzado el mar dos veces. También que la dejaron sola en un bosque junto con otra niña “de piel negra” a la que más tarde le rompió el cráneo en una pelea. Decía que siempre iban desnudas hasta que una mujer desconocida las recogió y les dio ropa. Pero tras la muerte de su compañera, la muchacha decidió huir. La deducción fue que la pequeña podría pertenecer a una tribu de esquimales que se dedicaban a cazar cetáceos y que llegó a Francia procedente de Norteamérica traída por algún viajero en compañía de la niña “negra”. Después presuntamente las abandonaron a su suerte por razones desconocidas. Sin embargo, parece que los supuestos beneficios de la civilización no le sentaron muy bien: no se acostumbró al régimen alimentario humano, perdió todos sus dientes y enfermaba con frecuencia. Algunos médicos poco inspirados vieron en esto una rebelión de su naturaleza salvaje y le practicaron sangrías para debilitarla. Finalmente, la salvaje acabó ingresada en un convento parisino, destino común de los niños perdidos, donde desaparece su pista definitivamente.
Otro niño salvaje fue Pedro de Hamelin, además de algunos de niños criados por osos, lobos y un niño criado por una gacela
En el libro de la selva, de Rudyard Kipling, la historia de Mowgli da a esta idea una expresión fantasiosa .Al intentar andar Mowgli el hijo de un leñador, casi muere entre las garras de un tigre ,pero una familia de lobos lo rescata .La madre loba, de inmediato ,se muestra fieramente protectora respecto al “cachorro del hombre” y consigue persuadir a su manada de que el niño siga de ellos .Con el paso de los años Mowgli aprende a vivir en la selva y, como los animales llega a ser muy sensible a “cada crujido de la hierba, cada suspiro de la noche calida, cada nota de la lechuza sobre su cabeza” Parece disfrutar de una armoniosa relación con la manada, pero en secreto, los lobos jóvenes advierten y envidian su superioridad. Al fin se ve forzado a dejarlos y regresar junto a su familia humana, prometiendo a su madre loba que algún día la visitara.
Nuestra actitud ambivalente respecto del lobo, en parte de miedo y en parte de admiración, nace también de la leyenda de Rómulo y Remo, los mellizos a quienes se les atribuye la fundación de Roma .La leyenda cuenta que Numitor el rey de la ciudad de Alba Longa fue destronado por su hermano Amulio, quien lo expulso de la ciudad, mato a sus hijos varones y obligo a su hija Rea Silvia a ser vestal (sacerdotisa virgen dedicada al culto de la Diosa Vesta).
Silvia tuvo 2 mellizos (Rómulo y Remo).La princesa Rea aseguro que el Dios Marte era el padre de sus hijos, pero esta distinguida paternidad sobrenatural no resulto una ayuda inmediata para los niños. El rey Amulio temiendo que le reclamasen el trono, mando que los arrojasen al rió Tíber. Una loba, animal sagrado para el Dios Marte los rescato y amamanto, y más tarde un pastor y su esposa cuidaron de ellos. Cuando llegaron a la edad adulta, los gemelos mataron al ursuspador, reinstauraron a su abuelo en el trono y posteriormente fundaron Roma.
A pesar de que estas historias resultan muy interesantes, Mowgli, Rómulo y Remo son a fin de cuenta seres humanos de manera definida, capaces de adaptarse a la sociedad de los hombres cuando es preciso. Mucho más intrigante es la idea de una criatura humana, pero que no resulta un hombre, que vive en la selva como una amenaza constante para la comunidad, que posee los instintos más bajos del hombre y la fuerza de una bestia...
Continuara…
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