El valor del tiempo

Franklin daba a la juventud este consejo:" ¿Amas a la vida?Pues no malgastes el tiempo,porque es la tela de la vida".
Los días llegan a nosotros como encubiertos amigos que en invisibles manos nos traen dones de subidisimo valor; pero si no lo sabemos aprovecharlo nos los arrebataran silenciosamente para no devolverlos más.Cada aurora trae en sus arreboles nuevas dádivas que si desdeñamos menguan de día en día hasta extinguir en nosotros la capacidad de recibirlas.Sabiamente se ha dicho que las perdida riquezas pueden recuperarse por el trabajo y el ahorro ;los conocimientos olvidados , renovarse por el estudio ;la salud quebrantada ; reponerse por a moderación y las medicinas; pero el tiempo perdido no se recuperara jamas.
En el seno de las familias se oyen generalmente expresiones como ésta "Solo faltan diez minutos para comer y no hay tiempo de hacer nada".Sin embargo, en estos pequeños instantes muchos niños desheredados se labraron un brillante porvenir.Si aprovecháramos el tiempo que malgastamos ,bastaría para asegurarnos el éxito.
La constante labor opera ,milagros .Una hora substraída diariamente a los paseos o a las diversiones frívolas bastaría para que un joven de medianas disposiciones dominara cualquier ciencia .Una hora diariamente aprovechada, convertiría al cabo de un año, en instruido al ignorante ,y seria suficiente para la lectura de dos diarios, dos semanarios, dos revistas ilustradas y una docena de libros instructivos.En una hora diaria puede un adolescente leer con provecho veinte páginas, osean siete mil en un año,equivalentes a dieciocho gruesos volúmenes.Una hora diaria puede definir la diferencia entre una existencia tediosa y una vida útil y feliz.Una hora diaria puede dar fama al desconocido y convertir a un hombre inútil en bienhechor del genero humano.Consideremos por o tanto, cuan potentes han de ser las posiblidades por no, ya una sino dos, tres, cuatro y aun seis horas que la juventud suele malgastar , en su loco afán por las diversiones,
Un gran hombre que conoció el preciosísimo secreto de acumular y poner en cuenta minutos sueltos,medias horas descabaladas, ratos ociosos y espera de gentes imuntuales,decia a este respecto:"Todo lo que hice y lo que espero hacer, lo hice y lo haré pensamiento por pensamiento y acto por acto, según aquel laborioso ,paciente y perserverante procedimiento con que la hormiga avitualla su nido.Y si alguna vez obré, por ambición ,no fue otra que la ardentísima de enseñar a la juventud de mi país, cómo es posible aprovechar los insignificantes pedacitos de tiempo que llamamos momentos".
De nada hemos de precavernos tanto como de la ociosidad, porque absorbe mucho mayor tiempo que cualquier otra ocupación y nos impide ser dueños de nosotros.
Para fortalecer la voluntad, todo joven debería tener suplementarias tareas, a la par útiles y agradables en las que pusiera todo su corazón sin importarle que fuesen o no análogas a sus ordinarias ocupaciones,pues elegidas acertadamente acrecentarán y transformarán el carácter, gracias al ejercicio intelectual que su cumplimiento demande.
El aprovechamiento del tiempo fortifica el carácter,y el carácter es triunfo.
De la propia suerte que algunos hombres amasan una fortuna acopiando ahorros que los dilapidadores desdeñan, así también algunos jóvenes pueden adquirir una buena educación aprovechando aprovechando los intervalos de tiempo que otros desperdician, ¿Que joven está tan ocupado que no pueda emplear una hora diaria en su perfeccionamiento individual?
Gran número de hombres insignes en la historia adquirieron celebridad por obras cumplidas en los momentos que les dejaban libres la ordinaria profesión, y que otros no supieron aprovechar.
El tiempo es la materia prima de la que no podemos hacer cuanto nos acomode .No vale recordar el pasado ni soñar en el porvenir ,sino aprovechar el presente con la llamada de atención que nos da la hora que suena.Todavía ha de nacer el hombre que sepa aquilatar el verdadero valor del tiempo.Fenelón dijo:"Dios sólo da un momento a la vez, y no nos deja disponer del segundo, sino hasta que ha pasado el primero".

Shakespeare decía."Yo malgaste el tiempo y ahora el tiempo me malgasta a mi".
El prejuicio del tiempo perdido no esta tanto en el tiempo mal gastado cuanto en la fuerza desperdiciada.La pereza enmohece los nervios y debilita los músculos.El trabajo tiene uno y otro método; la ociosidad no tiene ninguno.
En las fábricas de tejidos un solo hilo que se rompa hecha a perder la pieza entera y el importe del perjuicio se descuenta del salario del operario que lo causó;¿Pero quien pagará los hilos rotos en el lienzo de la vida?
Acordáos de que cada día modelamos nuestro destino y urdimos la tela de nuestro porvenir.El tiempo es dinero.No hemos de ser tacaños ni mezquinos con él;pero tampoco hemos de malgastar las horas, como malgastariamos un billete de banco.Malgastar el tiempo equivale a disipar energías , vitalidad, carácter.Equivale a disipar energías, vitalidad, carácter.Equivale a desperdiciar coyunturas que jamas volverán a presentarse.Cuidado de como gastáis el tiempo, porque en el tiempo se encierra todo nuestro porvenir.

(Extracto de un capítulo de la obra "Siempre adelante" de O.S Marden)